¡Lunares a mis paredes! eso es lo que pensé cuando vi unas fotos en un blog de decoración infantil. No sabía si eran pintados o era papel pero supe en ese instante que los quería en mi casa.
Elegimos una habitación que teníamos aún sin amueblar y sin darnos cuenta nos quedó un dormitorio con cierto aire infantil.
Si quieres llenar de topitos una pared tienes un montón de opciones. En este enlace podéis verlas. Quizás lo más fácil sea elegir un papel de lunares pero creo que es la opción que menos juego te da ya que el color del fondo te viene dado. Otra idea que estuvimos barajando fue la de estampar los lunares con una esponja o sello pero finalmente nos decidimos por los vinilos que eran fáciles y rápidos de colocar.
¿Os gusta? ¿Os animaríais a vestir de lunares vuestras paredes?
